Del amor y otros demonios

Hace varios años que tengo bastante mala suerte en el amor, pero no es eso lo que me preocupa. Me preocupa de sobremanera el dolor. Después de varias debacles con sus consiguientes pupas (y después de hacer daño a otros, por supuesto), me dan tentaciones de pensar que más vale estar sola para que no nos duela la pérdida cuando el amor termine. Sé que lo que acabo de decir es una burrada, pero a veces os juro que me entran tentaciones enormes de dejar de querer.
Bueno, es imposible dejar de querer... y de ahí que tenga esos horribles conflictos en mi cabeza: voy a liarme con Pepito, pero como me pille por él y él no... y la consecuencia es que ni me lío con Pepito ni leches en vinagre, huyo de Pepito y me como la cabeza durante semanas...
Claro que, por esa regla de tres, mejor no querer a mi madre, a mis abuelos, a mis hermanos, a mis amigos... porque ¿y si mueren antes que yo? (Mi madre y mis abuelos, por supuesto, voy a dejar de quererles YA) Esto es una hipótesis tonta y exagerada (y un pensamiento un tanto egoísta, además)... es sólo para reírme de mí misma, algo que a veces hago bien.
Ahora estoy bien sola... pero quizás sea porque ni siento ni padezco... ¿soluciones...?
¿No pensar en el futuro y disfrutar del presente? ¡¡¿¿Cómo se hace eso??!!
Sé que mi mala suerte en el amor es por mi culpa casi siempre. Tengo verdadero PAVOR.
En definitiva, el tema del amor es para mí un misterio insondable... me da pánico arriesgarme, pero sé que si no me arriesgo, nunca ganaré... Laberinto mental... nunca pensé que fuera a ser tan tan tan difícil... S.O.S!!!!!!!!